Debemos ser fervientes en lo que hemos creído y permanecer en la doctrina de Cristo y los apóstoles, y la gran pregunta es: ¿Cuál es la doctrina de Cristo? Toda la doctrina de Cristo se encuentra en Su Palabra: La Biblia. Y en ella se encuentra todo lo que necesitamos para vivir una vida cristiana correcta, no necesitamos otro camino o una nueva revelación entregada por una persona, Su Palabra es suficiente y en ella nos sostenemos y permanecemos.
La Biblia nos habla sobre permanecer en la doctrina de Cristo y es Juan cuando dice:
9 Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo.
10 Si alguno viene a vosotros, y no trae esta doctrina, no lo recibáis en casa, ni le digáis: !!Bienvenido!
11 Porque el que le dice: !!Bienvenido! participa en sus malas obras.
2 Juan 1:9-11
Dios nos ha llamado a ser perseverantes en la doctrina de su Palabra, y esta perseverancia se logra leyendo y estudiando las Escrituras, recordemos que una ocasión Jesús dijo: «Escudriñad las Sagradas Escrituras». Es nuestro deber estudiar la Biblia, puesto que a través de ello nos damos cuenta de cuál es la buena voluntad de Dios para nosotros, la cual es santa y perfecta.
Por otro lado, está la parte de aquellas personas que vienen a nosotros enseñándonos una doctrina totalmente diferente a la que está expresada en la Biblia, y los apóstoles hacen muchas advertencias sobre esto y nosotros debemos tomarlas para no caer en las falsedades de este siglo.
Nunca debemos ser partícipes de las enseñanzas erróneas, pero recordemos algo importante, y es que la única forma de nosotros darnos cuenta de cuándo las doctrinas están erradas es siendo fieles estudiosos de lo que dice la Biblia.
Les insto a estudiar la Palabra de Dios para que no seamos engañados de falsas doctrinas.