Esta es la paga para los malvados, para los impíos de la tierra, aquellos que no tienen misericordia y cargan con un corazón enaltecido: serán humillados delante de Dios.
Su prosperidad no durará, sus pies tropezarán y sus memorias serán turbadas, Dios todopoderoso oscurecerá sus caminos, porque el Dios juez y justo les pagará conforme a sus obras, las cuales son malas.
Tú, pues hombre de corazón altivo, ¿qué podría pasar delante de Dios el cual es juez? A estos los humilla Dios y les hace pasar vergüenza. Estas son las palabras que encontramos en el libro de los Salmos:
Mas Dios es el juez;
A este humilla, y a aquel enaltece.
Salmos 75:7
Aquella persona cuyo corazón está lejos de Dios, en nada esta puede ser agradable delante de Dios, porque Dios humilla a los de corazón altivos, por eso es bueno que el ser humano encuentre el camino a la reconciliación con Dios.
Es claro que el Señor humilla a unos y enaltece a otros. ¿Quieres ser enaltecido por Dios? Deja la altivez, actúa con piedad, cumple rectamente lo que dice Su Palabra, y en aquel gran día del juicio final serás apartado para ir a morar con Él por la eternidad.
Pero los que fueron altivos durante su vida en la tierra, que cometieron impiedades y no se arrepintieron, estos también serán apartados pero no para morar con Cristo en la nueva Jerusalén, sino que serán echados al lago de fuego y azufre. Dios tenga misericordia de nosotros.