Creo que uno de los temas más mencionados en la actualidad es sobre el presidente de los Estados Unidos Donald Trump. Veo muchas publicaciones en las redes sociales de páginas cristianas glorificando a Dios por la postura «cristiana» del presidente Trump en temas como el aborto y la homosexualidad. Realmente, ¿Hay que ser cristiano para estar en contra de estas cosas? A través de toda la Biblia podemos estudiar que ser cristiano va más allá de la moral. Además, ¿Trump es un presidente misericordioso? Son muchas las cosas que debemos examinar en su persona, no es el simple hecho de ver las cosas que a mí me agradan y luego salir en las redes sociales diciendo que Trump es un presidente cristiano.
Ser cristiano es seguir las pisadas de nuestro Señor Jesucristo: Tener misericordia por los demás, amar, servir, hacer la voluntad del Padre, etc. Ser cristiano no es hacer unas cuantas obras buenas y otras malas. Recuerdo perfectamente muchos comentarios que se hacían por el año 2009 cuando Barack Obama tomó la presidencia de los Estados Unidos: » Un presidente cristiano en los Estados Unidos». Luego que transcurrieron unos años y el pasado presidente americano apoyó a la comunidad gay y el aborto, entonces los artículos cristianos comenzaron a tildar a Obama de «anticristo». Hermanos, ¿En qué pie estamos nosotros parados? No podemos andar por el mundo haciendo declaraciones inestables para crear confusión en la mente de las personas.
El 12 de noviembre del 2014 la página cristiana noticiascristianas.com hizo una publicación donde el predicador americano Joel Osteen hizo una declaración sobre Obama, la cual decía:
“Yo sólo creo en mi corazón que él es un cristiano”, dijo Osteen resaltando: “Él dice que es”.
Creo que es hasta normal ver un comentario así de Osteen, puesto que es un sujeto que al parecer cree que hasta satanás es salvo.
Obama por igual a lo largo de su gobierno hizo algunas publicaciones profesando su fe:
“Yo creo que hay muchos caminos que llevan al mismo lugar, y eso es una creencia de que hay un poder superior, la creencia de que estamos conectados como pueblo”.
“Soy un gran creyente de la tolerancia. Creo que la religión es lo mejor que viene con una gran dosis de duda”.
“Jesús es una figura histórica para mí, y él es también un puente entre Dios y el hombre, en la fe cristiana, y lo único que creo es que es de gran alcance, porque sirve como ese significado de que andamos buscando algo más alto”.
“(Jesús es) un maestro maravilloso. Yo creo que es importante para todos nosotros, cualquiera que sea su fe, para los profesores en la carne y también los maestros de la historia”.
“Me resulta difícil de creer que mi Dios consigne las cuatro quintas partes del mundo al infierno. No me puedo imaginar que mi Dios permita que algún niño hindú en la India que nunca interactúa con la fe cristiana, sea quemado de alguna manera por toda la eternidad. Eso no es parte de mi maquillaje religioso”.
“(El pecado es) de estar fuera de la alineación con mis valores”.
“(Si tú pecas en tu vida) si soy fiel a mí mismo y a mi fe esta es mi recompensa, cuando no estoy en la verdad, es mi propio castigo”.
Hermanos, hay un dicho muy popular que dice: «Las palabras se las lleva el viento». No existe nada como un cristianismo que profeso y a la vez estar contra el cristianismo. Obama no nos demostró ser un presidente cristiano y hemos visto que caímos en el error de decir que lo fue. Ahora queremos o tratamos de hacer lo mismo con Trump.
Recientemente he visto una publicación en la página Antena3 sobre una niña que necesitaba de una operación de urgencia en el corazón, la cual no pudo entrar a los Estados Unidos por el veto migratorio de Donald Trump.
¿Acaso esto no ha llegado a los oídos del presidente «cristiano» Donald Trump? Entonces en momentos como estos es que debe jugar sus roles como supuesto cristiano.
Hermanos, no nos dejemos engañar de apariencias de creyente que porque alguien haga unas cuantas cosas buenas darle el sublime nombre de Cristiano. Ser cristiano va mucho más allá de tener un versículo bíblico favorito y poner a unos cuantos ministros cristianos a orar por él. No todos somos cristianos, y vuelvo a decirlo: «No es lo mismo profesar ser cristiano que serlo». No debilitemos el cristianismo presentando a estos hombres como cristianos.