Este el salmo 37, escrito por David, podemos notar las acciones del impío, aquel perverso que maquina en contra del justo. Pero ¿sabes qué? El Señor siempre protege al justo.
Las acciones del impío son malas y es por eso que son aborrecidas por el Señor, y Él les paga conforme a sus obras y acciones. Es bueno que como persona justa que eres delante de Dios, no pierdas las esperanzas de que Dios te librará y no dejará que el impío te derribe.
Aunque veamos que el malo maquine en contra de nosotros, no debemos temer. Dios es nuestro socorro y nuestra ayuda. Es bueno que confiemos de la misma manera en que el salmista confiaba.
Maquina el impío contra el justo,
Y cruje contra él sus dientes;
Salmos 37:12
Es bueno que tengamos en cuenta que el malo maquina y cruje sus dientes en contra del justo sin razón, pero también podemos ver que el salmista contrastó el destino del impío y que pronto sería destruido por Dios.
El crujir de dientes que hace el hombre impío en contra del justo, pues muestra el odio y su ira en contra del justo. Pero todo aquel que invoca y que cree en el Señor, este será salvado, tendrás nuevas fuerzas y ningún impío le destruirá porque Dios le acompaña.
No importa que el malo arroje ira contra ti, no importa que sus dientes crujan en contra de ti. Debes recordar que Dios es tu esperanza y Él es quien destruye al diablo y sus seguidores.