La justicia divina De Dios actúa conforme a la voluntad de Dios y no a la voluntad de los demás. Por eso no debemos pagar mal por mal, sino que a aquel que te maldice, págale con palabras benditas.
Estar siempre firme en lo que haces, mantener tu actitud y no cambiar aunque los demás te hagan daño. Hacer lo bueno por encima de todo lo que te quiera dañar. Es por eso que la misma Palabra nos habla acerca de estas acciones que toman otros que pagan mal por mal, y la en Biblia podemos ver recomendaciones de seguir haciendo lo bueno y más cuando somos hijos de Dios.
Mirad que ninguno pague a otro mal por mal; antes seguid siempre lo bueno unos para con otros, y para con todos.
1 Tesalonicenses 5:15
Lo primero que podemos observar es la forma en la cual se expresa el autor de esta epístola, cuando este dice que no paguemos a los demás mal por mal, este es el mundo en el que hoy vivimos. Muchos toman este consejo pero otros no, sino que hacen lo que la mente le dicta, si hubo alguien que le ocasionó un daño y le trató mal, ésta busca la forma de poder actuar y defenderse con toda la fuerza que pueda.
El consejo final es que seamos buenos con todos, hasta con aquellos que nos hacen daño. Recordemos que llegará el gran día en que cada quien pagará delante del Fuerte y Poderoso por todo lo que hizo en la tierra, Suya es la venganza, así que, haz el bien, y un día recibirás buena recompensa.
