En el evangelio según Juan podemos ver lo que Jesús les decía a sus discípulos, aquellos a los cuales había llamado para que le siguieran, porque de esta forma aprenderían lo que Jesús les quería enseñar.
En los discípulos siempre había una enorme preocupación, esto pasaba porque Jesús les hablaba de muchas cosas que pasarían, en un futuro no muy lejano. Por estas razones ellos se sentían mucha preocupación. Por eso las palabras que Jesús dice en el siguiente verso:
No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí.
Juan 14:1
Muchas palabras de Jesús decía ponían a los discípulos muy pensativos y preocupados, por eso Jesús también les decía palabras de aliento. Sabemos claramente que venían tiempos muy difíciles para aquellos que fueron llamados por Jesús.
Antes del versículo que acabamos de ver, Jesús les hablaba a sus discípulos sobre la traición que iba a sufrir de parte de uno de los discípulos. Nos podemos imaginar cómo se pusieron los discípulos en ese momento, muy preocupados, diciendo ¿soy yo Señor?, otros quizás hablaban por dentro de ellos.
Pero Jesús, en las palabras que acabamos de ver en Juan 14:1 les dice a sus discípulos «tranquilos y tengan paz en su corazones».
Estamos viviendo tiempos difíciles, existe una gran incertidumbre sobre el futuro y cómo será el mundo, el temor de que nada vuelva a ser como antes. Por eso nosotros también podemos tomar estas palabras que Jesús pronunció para sus discípulos.
No importa el momento que estés pasando, si el Señor dijo que habrá paz en tu corazón, pues créelo que así será.