El libro de Oseas, en su capítulo 6, verso 6, nos muestra claramente lo que Dios desea de Su pueblo. El enfoque no estaba en la cantidad de sacrificios que ofrecieran, sino en la bondad y el amor que demostraran hacia los demás.
Lo que el Señor buscaba era misericordia más que sacrificios. El pecado en el que andaban impedía que comprendieran lo que Dios realmente quería de ellos, ya que el pecado ciega y lleva a hacer aquello que no agrada al Señor. Y Él lo dice de forma clara: “Quiero de ti amor, bondad y no sacrificios vacíos en medio de tu pecado.”
El Señor habló con claridad acerca de su deseo y lo que esperaba que el pueblo hiciera. Por eso los reprende y les revela estas verdades a través del libro de Oseas:
Porque misericordia quiero, y no sacrificio, y conocimiento de Dios más que holocaustos.
Oseas 6:6
¿Hoy en día no ocurre lo mismo? ¿No vemos también que la iglesia de Cristo carece de estas cosas? ¿Has notado cómo muchos se han enfocado más en sacrificios y ritos que en la bondad y el amor que el Señor verdaderamente busca?
En el mundo actual, muchas personas creen que sus sacrificios, aunque estén vacíos de obediencia, amor y misericordia, agradan al Señor. Pero no es así. Es todo lo contrario.
Recuerda lo que Dios busca de Su pueblo. Y si descubres que estás haciendo lo contrario, entonces cambia y haz lo que Dios quiere de ti: que seas bondadoso, misericordioso y que demuestres amor por los demás, antes que ofrecer sacrificios y holocaustos vacíos.