El que da al pobre no tendrá pobreza

El Señor promete bendecir al corazón generoso, ya que el hombre que actúa con misericordia hacia el pobre refleja el carácter de Dios. Sin embargo, debemos entender que esto no se trata de dar esperando un beneficio a cambio, más bien de ayudar sin ninguna condición.

Salomón nos habla de cuán bueno es Dios cuando nuestro corazón siente misericordia por el prójimo, especialmente cuando actuamos al ver las aflicciones o necesidades de un hermano. Con un corazón que agrada a Dios, nos levantamos y damos al necesitado, sabiendo que recibiremos recompensa del Señor.

En el siguiente pasaje observamos claramente la promesa que el proverbista destaca acerca del corazón generoso. Aquel que da al pobre no experimentará pobreza. Por eso, este pasaje bíblico nos recuerda la gran bendición de ayudar a los demás:

El que da al pobre no tendrá pobreza;
Mas el que aparta sus ojos tendrá muchas maldiciones.

Proverbios 28:27

Son muchos los que hoy en día apartan sus ojos y no piensan en aquellos que no han comido, que carecen de abrigo o que no tienen un lugar donde dormir. Según este versículo, quienes actúan de esta manera tendrán muchas maldiciones y serán rechazados por el Señor en aquel día.

Por ello, hermanos, es importante que bendigamos al pobre. Si tenemos un pan, compartámoslo con quienes lo necesitan y no apartemos nuestros ojos de ellos. Seamos sabios y demos al necesitado en el nombre de nuestro amado Jesús.

...
Cayeron, y no hubo quien los ayudase
Juan 3:16 en 23 traducciones de la Biblia

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *