Cuando escuchamos el llamado de Dios en nuestras vidas, que escuchamos esa voz que nos insta a no preocuparnos, nos sentimos seguros y más cuando estamos en nuestros momentos más difíciles y escuchamos una palabra como esta: Yo estoy contigo para librarte.
En el libro de Jeremías podemos encontrar que además de ser una promesa para este profeta, el Señor le decía que no tuviese temor de nada, porque el mismo Dios estaba con él.
Aquí es donde comienza el llamamiento de Jeremías, y estas fueron las palabras que Dios le dio para que pudiese sentirse más confiado en las manos poderosa de Dios:
No temas delante de ellos, porque contigo estoy para librarte, dice Jehová.
Jeremías 1:8
Hermano que estás leyendo, ¿estás pasando por alguna prueba difícil o tienes que enfrentar algo que te parece muy grande? El Señor te dice hoy: No temas, Yo estoy contigo.
Es necesario que creamos en las palabras que el Señor nos da, no dudemos que Dios va con nosotros y nos puede ayudar y librar de cualquier mal. Por eso te invitamos hoy a que lo creas y pronuncies con tus propios labios: No temo, porque Dios está conmigo.
