Dios realmente nos ha amado como nadie nos ama en este mundo. Escucho a muchos personas decir que no existe un amor como el de una madre, pero lo cierto es que no existe un amor como el de Dios, quien ofreció a su único Hijo para darnos salvación y librarnos de su ira.
El único motivo por el que estamos aquí es porque Cristo entregó su preciosa sangre por nosotros en la cruz del calvario.
8 Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
9 Pues mucho más, estando ya justificados en su sangre, por él seremos salvos de la ira.
10 Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos por su vida.
Romanos 5:8-10
Lo principal aquí es que Cristo murió por nosotros, aún nosotros siendo terribles pecadores. O sea, nosotros siquiera merecíamos que alguien tan sublime y santo entregue por nosotros su vida. Nosotros éramos culpables, merecedores del peor castigo, pero Dios nos amó con amor eterno y entregó a su Hijo por nosotros.
Así es, hemos sido reconciliados a través de su muerte, y a través de esa muerte tenemos vida, y ya no somos enemigos de Dios, ya no estamos separados de Él, y esa muerte nos justifica, nos salva y redime. Por lo tanto, sigamos dando gloria y honra a Dios y siempre comprendamos lo intenso de su sacrificio y que cada mañana comprendamos el valor de que Cristo murió por nuestros pecados.
Señor no soy merecedor de tu perdón, pero un palabra Tuya bastará para sanarme y perdonarme. Ha pesar de mejorar mi vida día a día y fortalecerme con la Oración y vivir esforzándome como nos enseñó nuestro Señor Jesucristo. Mi vida está llena de satisfacción porque cada día vivo como si fuera mi último día de mi vida. Amen
1 comment on “Cristo murió por nosotros”
Señor no soy merecedor de tu perdón, pero un palabra Tuya bastará para sanarme y perdonarme. Ha pesar de mejorar mi vida día a día y fortalecerme con la Oración y vivir esforzándome como nos enseñó nuestro Señor Jesucristo. Mi vida está llena de satisfacción porque cada día vivo como si fuera mi último día de mi vida. Amen