Jesús es el único que puede ofrecer descanso a millones y millones de personas en todo el mundo, y lo mejor de todo es que el descanso que Jesús ofrece es gratuito. Lo más impresionante es que no somos merecedores de este descanso, aún así, la invitación está abierta para que disfrutes de este descanso:
28 Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.
29 Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas;
30 porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.
Mateo 11:28-30
Posiblemente ese sea uno de los versos más mencionados o citados en la iglesia, pero, ¿entendemos la magnitud de las palabras dichas por Jesús? Lo primero es que, Jesús no lo dice a un grupo con privilegios, Jesús dice “todos”, esto quiere decir, que sin importar tu complexión física, raza, nacionalidad, etc, esta invitación es para todo aquel que esté trabajado y cargado.