Un peregrino hace poco arrastró a miles de personas en Puerto Plata, República Dominicana, diciendo que Dios le había dicho que clavara una cruz en las aguas de Puerto Plata, y que de esa manera el virus se detendría a partir del día siguiente. Sin embargo, los casos de contagio en República Dominicana van en aumento y se espera que aumente más por todas las personas que se reunieron en dicha cruzada violando el confinamiento.
Luego de esto el gobierno dominicano ha hablado de implementar un «cordón epidemiológico» o más bien tomar medidas preventivas en esta ciudad donde se realizó la cruzada en la cual miles de personas (niños, hombres, mujeres) siguieron al peregrino por unos 18 kilómetros.
Lo cierto es que ya es tarde para tomar decisiones de parte del gobierno, pues, ¿se imagina usted todos los posibles contagios que comenzaron a partir de esta reunión multitudinaria? Todo esto es parte de la ignorancia de las personas, pues, la mayoría de los que estaban ahí reunidos creían en las palabras de este hombre, incluso, algunos le pedían que toque su cabeza para ser sanos.