Los malos serán consumidos por su misma maldad y sus pies tropezarán hasta caer en lo más profundo de un agujero. Estos pecadores y perversos de la tierra serán destruidos por sus mismos hechos.
¿Acaso hemos visto salir a flote a una persona llena de maldad? Las maldades que tienen en sus pensamientos pronto se volverán en contra de ellos y los acabará por pecadores y malignos y porque en los cielos está el Dios grande y poderoso que ve todo lo que hacen.
Pero qué bueno es cuándo podemos ver la integridad de los justos delante del Señor:
La integridad de los rectos los encaminará;
Pero destruirá a los pecadores la perversidad de ellos.
Proverbios 11:3
El verso anterior nos hace entender que la sabiduría está con aquellos humildes que no son pecadores y de mal pensamientos.
En este verso también podemos ver la separación que hay entre los pecadores y los rectos delante del Señor. El recto servirá al Señor y será bendecido, pero los pecadores y malos serán destruidos por su propia perversidad.