El amor al dinero es algo que provoca daños en la vida de las personas, hablando más claro, aquellos cuyo dios es el dinero a tal punto que son capaces de venderle un hijo al enemigo de las almas con tal de tener más y más.
Tener dinero no es malo, el problema estar en amar al dinero, y ese amor al dinero puede llevarte a hacer cosas reprochables, porque solo piensas en tener dinero.
Es bueno tener abundancia de bienes materiales pero debemos recordar que todo es vanidad, pues un día irás a la tumba y nada de este mundo te llevarás. De nada sirve solo trabajar para tener y nunca disfrutarlo. El ser humano mientras más tiene más quiere y es por eso que muchos amasan grandes fortunas y no las disfrutan porque trabajan solamente para tener más.
La Biblia nos aconseja sobre esto, nos advierte que tengamos cuidado, ya que una vez te vuelves muy amante del dinero, entonces se te he difícil poder salir de esta enorme vanidad.