Isaías 43 es un hermoso pasaje de la Biblia que nos habla de la inmensa protección de Dios hacia su pueblo Israel, pero no solo para Israel, sino también una demostración de poder y amor hacia nosotros Sus hijos.
Yo, yo Jehová, y fuera de mí no hay quien salve.
Isaias 43:11
El pueblo de Israel, en todo este pasaje, se llena de esperanza al escuchar todas las palabras hermosas que su Dios estaba pronunciando. Palabras de aliento, que les decían que el Dios de Israel estaba con su pueblo, y que sin importar la más grande circunstancia por la que estén pasando, Él estaría con ellos.
Hay algo importante que entender de este verso 11, y es que Dios está destacando Su poderío absoluto, exhibiéndose así como el Dios mayor entre los dioses, y no solo eso, sino como el único Dios absoluto, anulando así la idea de un dios secundario, de un dios inferior.