Sed santos, porque yo soy Santo
Todo cristiano debe preocuparse por vivir una vida en santidad, apartado del pecado y de la corrupción de este mundo ya que la Biblia nos lo manda una y otra vez. La Biblia nos dice que debemos ser imitadores de Dios, y Dios es sumamente Santo, por lo cual, debemos luchar por ser imitadores de ello y vivir una vida que se conduce cada día hacia la santidad.