Haz las cosas de corazón

En Colosenses 3:18-25 el apóstol nos habla sobre los deberes sociales en nuestra nueva vida como creyentes y en los versos anteriores sobre nuestra vida antigua y la que vivimos ahora luego de haber recibido a Cristo, es decir, todo está conectado en cuanto a lo que éramos antes, y cómo debemos ser ahora.

En el mismo capítulo tres de la carta a los Colosenses, exactamente del verso 18 al 25 Pablo hace una serie de ordenanzas a esa iglesia sobre cómo deben vivir en su nueva vida de creyentes en Cristo.

Le habla a las casadas, maridos, hijos, padres y siervos. Prácticamente en estos versos está hablando a todo tipo de personas sobre los deberes que tienen en el día a día, recordándoles que ya no deben proceder como antes, sino que en Cristo todo es sumamente diferente.

¿Eres creyente? Entonces ya no debes portarte áspero tu cónyuge, y es que cuando Cristo llega a la vida de una persona su vida cambia radicalmente y ya no podemos ser ese tipo de personas que hace todo con enojo, sino con amor. Veamos las instrucciones de Pablo:

18 Casadas, estad sujetas a vuestros maridos, como conviene en el Señor.

19 Maridos, amad a vuestras mujeres, y no seáis ásperos con ellas.

20 Hijos, obedeced a vuestros padres en todo, porque esto agrada al Señor.

21 Padres, no exasperéis a vuestros hijos, para que no se desalienten.

22 Siervos, obedeced en todo a vuestros amos terrenales, no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino con corazón sincero, temiendo a Dios.

23 Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres;

Colosenses 3: 18-23

¿Eres padre, hijo, esposa, empleado? Haz todo eso con amor, de corazón, como para el Señor, no para los hombres, ya que la recompensa del Señor es grande.

...
Si crees en Jesús, tu vida será transformada
El sabio de corazón recibirá los mandamientos y no tropezará
Compártelo usando uno de los siguientes iconos:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.