Muchas veces pensamos que Dios no escucha nuestra oraciones, y esto por el hecho de que sentimos que oramos y oramos, y no vemos materializado lo que pedimos, pero debemos entender algo muy importante de Dios, nuestro Señor no actúa como nosotros actuamos, Él conoce el tiempo perfecto y justo. Nosotros tendemos a desesperarnos, pero en medio de esa desesperación muchas veces estamos a un paso de lo prometido. Si piensas que Dios no responde tus oraciones, quiero que sepas que eso no es así, Dios siempre escucha a sus hijos.
El salmista escribió:
17 Claman los justos, y Jehová oye,
Y los libra de todas sus angustias.
18 Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón;
Y salva a los contritos de espíritu.
19 Muchas son las aflicciones del justo,
Pero de todas ellas le librará Jehová.
Salmos 34:17-19
Todo hombre que clamó a Dios en las Escrituras, Dios le respondió y lo libró de todos sus temores, porque ellos confiaban en Dios y tenían a Dios en primer lugar. De la misma manera nosotros debemos aprender a confiar en Dios, de creer en Dios, que no importa el momento tan terrible en el que nos encontremos. Recordemos la historia de los tres jóvenes que fueron lanzados al horno de fuego, a ellos no les importaba nada más que honrar a Dios y sabían que para Dios era algo insignificante librarlos de ese horno de fuego.
¿Estás quebrantado? Pues entonces es importante que entiendas que Dios está cerca de ti. ¿Estás contrito de espíritu? Entonces debe entender que aquellos que están afligidos Dios los librará de todas sus aflicciones.
Debemos comprender que Jesús nos ha prometido estar con nosotros todos los días hasta el fin, que Él guarda sus ovejas y que ninguno de nosotros perecerá en sus manos.
