«El Señor viene pronto», este es el mensaje que predicamos y que confirmamos a través de las Escrituras que un día nuestro Rey y Señor regresará por su santa iglesia, y esta vez no lo hará como un manso cordero, sino que viene como el león de la tribu de Judá, todos tendrán que rendirse ante su majestad, todos tendrán que guardar reverencia ante el que está sentado en el trono… Cristo de verdad viene pronto.
El apóstol Pedro dijo:
8 Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día.
9 El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.
10 Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas.
2 Pedro 3:8-10
Lo primero es que nosotros a pesar de que el mundo nos juzgue porque decimos que Cristo viene pronto y han pasado años y años y aun no viene, esto no debe ser motivo de desaliento para nosotros, ya que Dios es claro en su Palabra, y Él en realidad nunca nos ha dado fecha y eso de que viene pronto sigue siendo cierto, pues, en estos versos Pedro dice: «Para con Dios un día es como mil años, y mil años como un día». Es decir, para Dios no existe el tiempo como para nosotros, Él es infinito, no tiene principio ni final.
Lo cierto es que el día del Señor vendrá como ladrón en la noche, un día que usted y yo no sabemos la fecha, así que debemos estar esperando ese día de Jehová preparados y confiados.
