Trozo de Biblia queda intacto luego de incendio en República Dominicana, bomberos hallaron el siguiente mensaje bíblico

En un video que circula en las redes sociales, se puede observar a un bombero leyendo un trozo de Biblia que quedó intacto luego de un incendio.

Este enorme incendio donde se quemaron varias viviendas ocurrió en el sector de San Carlos en el Distrito Nacional en Santo Domingo, República Dominicana, el sábado 10 de abril del 2021. Diecinueve personas quedaron sin hogar.

Es sorprendente el gran mensaje con el que se encontró uno los de los del cuerpo especializado de bomberos. Este encontró el gran trozo de Biblia entre los restos del incendio y se sorprendió al leer el mensaje que encontró. En mensaje que encontró fue el siguiente:

«Después de que el rey quemó el rollo de las palabras de Jeremías, el Señor le dijo a Jeremías tome otro rollo y escribe en él el mismo mensaje que escribiste en el rollo que se quemó».

Este mensaje se encuentra en Jeremías 36:27-28. Después de leer la lectura, muchos de los que estaban allí presentes se asombraron y dieron gloria y alabanzas al Señor. Este video ha causado mucha conmoción entre todos los que lo han visto.

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Reflexión final

Lo sucedido en San Carlos no es solamente una anécdota curiosa o un hecho llamativo para las redes sociales. Es, en realidad, un recordatorio profundo de que la Palabra de Dios permanece para siempre. En medio de las llamas, entre cenizas y ruinas, un pedazo de Biblia se mantuvo en pie con un mensaje que parecía hablar directamente a la situación: la Palabra puede ser atacada, menospreciada o incluso quemada, pero jamás será destruida. Jeremías 36 muestra precisamente que, aunque un rey rebelde quiso acabar con lo que Dios había dicho, el Señor ordenó volver a escribir las mismas palabras, reafirmando que Su mensaje no puede ser silenciado.

Para los testigos de este acontecimiento, fue un recordatorio de esperanza en medio de la tragedia. Muchas familias lo perdieron todo: casas, pertenencias, recuerdos de toda una vida. Sin embargo, Dios dejó en medio de la destrucción una señal clara: Su Palabra sigue siendo el consuelo, la guía y la fuerza que ningún fuego puede consumir. Lo material puede perderse, pero lo eterno permanece firme. Esa es una enseñanza vital para todos los creyentes, porque nos recuerda que lo único que nunca se extinguirá es la verdad de Dios.

Este hecho también nos invita a reflexionar sobre nuestra propia vida. Así como el fuego consumió casas enteras en cuestión de minutos, así también las cosas terrenales que tanto valoramos pueden desvanecerse repentinamente. Nuestra confianza no puede estar puesta en lo perecedero, sino en lo que permanece para siempre: el amor de Dios y Su Palabra. Isaías 40:8 lo dice claramente: “Sécase la hierba, marchítase la flor; mas la palabra del Dios nuestro permanece para siempre”.

La escena del bombero leyendo ese versículo es también un testimonio de cómo Dios habla en los momentos más inesperados. A través de un fragmento sobreviviente, Dios recordó a todos los presentes —y a quienes luego vieron el video— que Su Palabra no depende de un libro físico, sino que es eterna, viva y eficaz. Sin embargo, es impactante ver cómo, incluso en lo físico, Dios preserva Su mensaje como testimonio para los hombres. Tal vez muchos que nunca hubieran abierto la Biblia fueron conmovidos por lo que ese bombero leyó en medio de los escombros.

En conclusión, este acontecimiento debe impulsarnos a valorar más la Palabra de Dios, a leerla, meditarla y obedecerla. Porque así como sobrevivió a las llamas de un incendio en Santo Domingo, también nos acompaña a nosotros en medio de las pruebas de la vida. El fuego puede consumir lo visible, pero no puede apagar lo eterno. La Biblia nos recuerda que “el cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán” (Mateo 24:35). Que este hecho nos inspire a confiar en que, aunque todo lo demás se derrumbe, la Palabra del Señor seguirá siendo nuestro fundamento inquebrantable.

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