Hacer el bien a los demás es parte de las cosas buenas de una persona que tiene a Dios, y todo aquel que tiene a Dios está lleno de misericordia, bondad y amor.
La Biblia nos habla claramente de estas personas que tienen en abundancia, pero que no son humildes, y que ponen sus bienes por encima de todo, se olvidan de que un día todo se puede terminar.
Algo que debemos recordar que a la persona altivas, nuestro Dios los ve desde lejos, mas aquel que vive humildemente, que su corazón solo piensa en buscar a Dios, que no son amantes de las cosas terrenales y que solo piden a Dios para poder sobrevivir, estas personas reciben de Dios bendiciones en grande.
Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad, y cierra contra él su corazón, ¿Cómo mora el amor de Dios en él?
1 Juan 3:17
El amor de Dios no solo se demuestra de boca, sino claramente como nos dice el versículo anterior, debemos amar con hechos, accionando cuando vemos un hermano con necesidad, que cuando veamos a este hermano padeciendo de hambre y nosotros teniendo, ¿cómo no levamos a suplir? y a estas cosas es que Juan dice que demostremos el amor de Dios.
No cierres tu corazón a la persona que ves a tu frente, que necesita de tu ayuda. Dios está en los cielos y está viendo lo que estás haciendo, que tu amor crece más y más, que demuestras que el amor de Dios es verdadero, que demuestras con hechos y alegría del corazón. Da con alegría del corazón.