Respóndeme pronto, oh Jehová, porque desmaya mi espíritu

El Salmo 143:7 nos habla de un hombre que pedía a Dios ser librado de sus adversarios, de aquellos que le perseguían cada día para destruir su vida.

Ante todo este hombre llamado David tenía algo muy pendiente en su corazón, él sabía cómo ir delante de la presencia de Dios. Sabía cómo debía actuar en presencia de Dios pidiendo misericordia y liberación. Pero fíjese bien que no era que David estaba siendo cautivo físicamente, sino de aflicción de espíritu.

El salmista David en este salmo pedía a Dios la dirección para poder avanzar en el camino y hacía súplica de misericordia delante de Dios.

7 Respóndeme pronto, oh Jehová, porque desmaya mi espíritu;
No escondas de mí tu rostro,
No venga yo a ser semejante a los que descienden a la sepultura.

8 Hazme oír por la mañana tu misericordia,
Porque en ti he confiado;
Hazme saber el camino por donde ande,
Porque a ti he elevado mi alma.

9 Líbrame de mis enemigos, oh Jehová;
En ti me refugio.

10 Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios;
Tu buen espíritu me guíe a tierra de rectitud.

Salmos 143:7-10

La angustia de este hombre era tan grande que pedía a Dios venir pronto en su socorro, pero a pesar de su desesperación, sabía que Dios vendría a él. A veces pedimos a Dios que descienda, pero ignoramos que está bien cerca.

El clamor de David era muy sincero y grande delante de Dios, pero, ¿sabes algo? Dios venía a David y le ayudaba, no lo desamparaba, Su poder era manifiesto y lo fortalecía, Él era su escudo poderoso.

Es bueno que aprendamos a hacer Su voluntad, que aprendamos a pedir a Dios y también a esperar su respuesta, porque Dios actúa en el tiempo correcto, no cuando nosotros queramos.

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Bienaventurados somos por cuanto padecemos por nuestro Señor
Jehová es mi fortaleza y mi escudo en los momentos difíciles
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1 comment on “Respóndeme pronto, oh Jehová, porque desmaya mi espíritu

  1. Nosotros debemos pedir y andar cor Jesús en todo momento en las buenas y en las malas sucesos de nuestras vida. Bendiciones.

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